Muchas personas que odian acumulan energías dentro de si mismas o las transmiten hacia otras. A veces ocurre que nos acercamos a determinadas personas y de repente nos comenzamos a sentir mal o nos duele alguna parte del cuerpo. Los dolores de cabeza son lo que más ocurren. Estas simples energías, son percibidas frecuentemente, pero se pueden investigar más profundamente y ver su utilidad. De hecho existen fuerzas que las percibimos cotidianamente. En principio, las personas que mucho odian, la energía actúa en su contra y le producen diversas enfermedades, por lo que deben canalizar su energía hacia algo más positivo. Esas personas que odian y mucho se enferman, tienen potencia para la magia. Si lo supieran utilizar serían chamanes en potencia y sanarían de sus males.
En los años 1900-1910, se dio inicio a la radiónica por medio de Albert Abrams, quien inventó algunas máquinas que supuestamente influían en las personas a partir de tener algunos objetos personales de ellos como fotos, cabellos, prendas personales. Estas máquinas, no demostraron científicamente que tal cosa fuera posible aunque hicieron millonario a Abrams. Pero si demostraron que existe ese tipo de energía. El problema era que estas energías no funcionan a través de máquinas. Se han hecho estudios científicos a los chamanes de los pueblos indígenas con resultados realmente asombrosos, tanto en el campo de la prosperidad como en la salud.
Magia proviene de magisterio, maestría, sacerdote o magusk en caldeo. De hecho la magia es la que dio el origen a la religión y los milagros. En principio entonces, la magia funciona dependiendo del operador, el cual tiene que tener las condiciones natales o aprendidas. Luego, los chamanes se ayudan con ciertas plantas que ayudan en su tarea al maestro. Adicionalmente, ya sea por los poderes que puedan desarrollar los chamanes, con ayuda o no de las plantas, estos operan con las fuerzas de la naturaleza, con la madre tierra, con las ondinas del agua, con las salamandras del fuego, con las ondas del aire.
La magia ha existido en todos los pueblos de la antigüedad y nuestra existencia y evolución tienen allí sus raíces, las cuales hasta el momento han seguido fuertes. Los magos son los primeros que lograron manejar las ondas electromagnéticas a distancia. Diversas pruebas en universidades de prestigio han demostrado que se puede influir en las células con concentraciones de meditación a miles de kilómetros de distancia.
Se están efectuando muchas investigaciones en el campo de la oración a distancia para la cura de enfermos terminales inclusive, que no es otra cosa que las prácticas ancestrales chamánicas. Los chamanes utilizan ciertos mantras o palabras repetitivas, canciones, ritmos monótonos, que focalizan su energía y equivalen a las oraciones. Si se sabe como funciona la magia, realmente es la focalización de las ondas electromagnéticas. Prueba en tu casa con una foto y haz que por lo menos 3 personas se concentren en determinada persona que se tarda en llegar a casa. Te sorprenderá que de 10 veces, por lo menos influenciarán en 5 o más veces en que la persona se desesperará por volver a casa.
Si tienes un enfermo grave, procura reunir a la mayor cantidad de amigos y que hagan sesiones de visualización de que el enfermo se encuentra sano, que lo imaginen corriendo por la playa, trabajando feliz, totalmente restablecido. Verás que su proceso de recuperación será mucho más rápido. Claro, que todo tiene su tiempo y su destino. No todos los casos se pueden recuperar, pero si el caso es muy grave, los dolores o su partida serán más atenuados.
La mágia, existe, tu puedes comprobarlo.
Te conjuro, espíritu del Mal, para que no te acerques a este blog, ni a su autor, ni a su familia; y que te alejes de esta medalla de San Benito bajo cuya protección y amparo ha sido colocada; en el nombre de Dios Padre Omnipotente, que hizo el cielo y la tierra, el mar y todo lo que en ellos se contiene. Asimismo, que desaparezcan y se alejen de esta medalla toda la fuerza del Adversario, todo el poder del Diablo, todos los ataques e ilusiones de Satanás, a fin de que todos los que la usaren gocen de la salud de alma y cuerpo. Amén. Así sea.
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