SAÚCO Sambucus nigra: Significa beneficio. Su planeta es Venus, aunque para las operaciones mágicas hay que cogerlo bajo el signo de Leo. Se añade en sahumerios y talismanes contra los celos.
En la mitología germánica, el espíritu del saúco Frau Holle (la Dama del Saúco) es una mujer bondadosa, protectora de estos arbustos, que protege a los caminantes y ayuda a los humildes.
En Inglaterra se dice que muchas brujas se transformaban en saúcos y que sangraban al ser cortados y, por tanto, es extremadamente desafortunado quemar un saúco, muy peligroso dormir bajo sus ramas y, para cortarlo hay que hacer un ritual: pedirle permiso diciendo tres veces: “Dame tu madera, que yo te daré la mía cuando crezca en el bosque”, de no hacerlo, el leñador se quedaría ciego, perdería a sus hijos, o enfermaría su ganado.
Si crecen cerca un roble, un fresno y un espino puede cortarse una rama de cada uno, unirla con una cinta roja, es una gran protección contra los espíritus.
Lantarón, un dios cántabro del mar se representa portando una vara de saúco, de cuyos frutos negros mezclados con leche de sirena, se prepara un brebaje que otorga sus poderes mágicos al tiempo que lo hace fosforescente durante la noche.
Aleja las moscas.
Para proteger una casa contra encantamientos hay que clavar una hoja de saúco detrás de la puerta.
Si alguien tiene bronquitis puede hacer un sahumerio en la habitación donde vaya a dormir.
Contra el herpes zoster, las curanderas azotaban suavemente al enfermo con hojas de saúco.
El saúco, no es un árbol propiamente dicho sino un arbusto caducifolio, aunque posee un porte arbóreo y a menudo es considerado un árbol pequeño. Su nombre proviene del griego "sambuké" que significa "flauta" y el latín "nigra" ("negro") que probablemente haga referencia al color que toman sus frutos una vez maduros.
Tradicionalmente el saúco ha sido muy apreciado por sus propiedades medicinales y se lo plantaba cerca de las casas por ser un repelente contra insectos y roedores ya que en sus ramas anidan diversas especies de avispas predadoras que controlan la proliferación de otros insectos. En Cataluña se le conoce como el "bon arbre", "el buen árbol", debido a sus múltiples propiedades medicinales.
El saúco se utiliza como antiinflamatorios, su corteza es diurética, sus frutos son laxantes y depuradores y sus hojas también poseen propiedades desinfectantes entre otras muchas.
El saúco es uno de los árboles que más profundamente asociado está a la tradición mágica y feérica, quiza por esa razón el cristianismo convirtió su madera en la de la cruz de Jesucristo y el árbol en el cual se ahorcó el "traidor" Judas Iscariote, añadiéndole además de estas otras connotaciones negativas, asociándolo a las brujas, la magia negra y la hechicería.
De hecho, las bayas del saúco son conocidas en muchos lugares de España como "uvas de bruja", quizá debido a sus propiedades alucinógenas que hacían que antiguamente se lo utilizase en ceremonias religiosas con fines proféticos y adivinatorios.
El saúco también era utilizado en ceremonias funerarias; a menudo se plantaba en las tumbas y se creía que si el árbol florecía el alma de la persona allí enterrada habría encontrado la felicidad en la tierra del eterno verano, el "Tir na N´Og de la mitología irlandesa.
Para los celtas y otras culturas paganas el sáco era hogar de elfos y hadas; dentro del folklore nórdico encontramos a la Dama de los Saúcos o Hyldemoer (la Madre Saúco), un espíritu de la naturaleza que habita en todos y cada uno de estos árboles, mientras que en la tradición druídica se consideraba el último fruto sagrado de la tierra y el vino realizado con sus frutos solo podía ser bebido por los druidas. Se creía que maltratar o talar un saúco era castigado por las criaturas feéricas que habitaban en él, e incluso para cortar alguna de sus ramas, las cuales muy a menudo han sido utilizadas en la realización de varitas mágicas, es necesario pedir permiso a estos seres protectores.
Dentro de la tradición mágica el saúco también es llamado "Árbol de las Hadas", "Vieja Dama", el "Árbol de las Flautas" (ya que sus ramas, gracias a su médula blanda y hueca han sido utilizadas tradicionalmente para la realización de flautas) o "Lady Ellhorn", entre otros.
El saúco representa la muerte y el renacimiento, es por ello que su mes se sitúa entre noviembre y diciembre, la "época oscura" del año, en la cual la naturaleza se sume en su cíclico letargo del que no despertará hasta primavera.
Los druidas celebraban juicios y asambleas bajo este árbol y lo consideraban protegido por las hadas.
2 comentarios:
me encantan estos temas ademas de aprender cosas de los arboles aprendo cosas sobre las brujas es una pagina muy interesante y bella gracias por tus lecciones son magicas asi como la musica y las imagenes un saludo para ti de lola
QUE BUENA Y BONITA INFORMACION, No hay dudas que en este mundo hay muchas cosas que no sabemos y que cada ser vivo posee algo de magico. GRACIAS POR LA INFORMACION.
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