BannerFans.com
BannerFans.com
BannerFans.com

Blogumulus by Roy Tanck and Amanda Fazani

+A| A| A-

Una herradura, el calzado de Caballos, mulos y burros, colgada en algún sitio, está considerado como el más universal de todos los amuletos de la suerte.

La herradura era un talismán poderoso en todas las épocas y en todos los países en los que existía el caballo. Aunque los griegos introdujeron la herradura en la cultura occidental en el siglo IV, y la consideraban como símbolo de buena suerte, la leyenda atribuye a san Dunstan el haber otorgado a la herradura, colgada sobre la puerta de una casa, un poder especial contra el mal.

Según la tradición, Dunstan, herrero de profesión pero que llegaría a ser arzobispo de Canterbury en el año 959, recibió un día la visita de un hombre que le pidió unas herraduras para sus pies, unos pies de forma sospechosamente parecida a pezuñas. Dunstan reconoció inmediatamente a Satanás en su cliente, y explicó que, para realizar su tarea, era forzoso encadenar al hombre a la pared.

Deliberadamente, el santo procuró que su trabajo resultara tan doloroso, que el diablo encadenado le pidió repetidamente misericordia. Dunstan se negó a soltarlo hasta que el diablo juró solemnemente no entrar nunca en una casa donde hubiera una herradura colgada sobre la puerta.

Desde la aparición de esta leyenda en el siglo X, los cristianos tuvieron la herradura en alta estima, colocándola primero sobre el dintel de la puerta y trasladándola más tarde al centro de ésta, donde cumplía la doble función de talismán y picaporte.

Este es el origen del picaporte en forma de herradura. En otros tiempos, los cristianos celebraban la fiesta de san Dunstan, el 19 de mayo, con juegos en los que se empleaban herraduras.

Para los griegos, los poderes mágicos de la herradura emanaban de otros factores. Las herraduras eran de hierro, un elemento que se creía que ahuyentaba el mal, y la herradura tenía la forma de una luna en cuarto creciente, que desde antiguo era considerada como símbolo de fertilidad y fortuna.

Los romanos se apropiaron de este objeto, a la vez como práctico dispositivo ecuestre y como talismán, y su creencia pagana en sus poderes mágicos pasó a los cristianos, que dieron a esta superstición su versión basada en san Dunstan.

En la Edad Media, cuando cundía al máximo el temor a la brujería, la herradura adquirió un poder adicional. Se creía que las brujas se desplazaban montadas en escobas porque temían a los caballos, y que cualquier cosa que les recordara un caballo, especialmente su herradura de hierro, las ahuyentaba como un crucifijo aterrorizaba a un vampiro. La mujer acusada de brujería era enterrada con una herradura clavada en la tapa de su ataúd, para impedir su resurrección.

En Rusia, al herrero que forjaba herraduras se le consideraba dotado de capacidad para realizar «magia blanca» contra la brujería, y los juramentos solemnes relativos al matrimonio, los contratos comerciales y las compraventas de propiedades no se prestaban sobre una Biblia, sino sobre los yunques utilizados para martillear las herraduras.

Una herradura no podía colgarse de cualquier forma: su disposición correcta era con los extremos hacia arriba, pues de lo contrario su reserva de suerte se vaciaba.

En las Islas británicas, la herradura se mantuvo como potente símbolo de suerte hasta bien entrado el siglo XIX. Un popular encantamiento irlandés contra el mal y la enfermedad —originado a la vez la leyenda de san Dunstan— decía: «Padre, Hijo y Espíritu Santo, clavad el diablo en un palo.»

En 1805, cuando el almirante británico lord Horacio Nelson se enfrentó a los enemigos de su nación en la batalla de Trafalgar, el supersticioso inglés clavó una herradura en el mástil de su navío almirante, el Victory

Oración de la Herradura

Por la santísima trinidad, herradura yo te bautizo, en el nombre del dios padre, del dios hijo y del dios espíritu santo: Dame suerte, salud y dinero, cuando por el monte anduviste, señor Santiago entre espinas y abrojos, y a los enemigos les vendaste los ojos, con tu gran poder que tienes, quiero así, como pusiste a tu caballo esta herradura, y que con ella te libraste del campo de batalla, así quiero que ese gran poder que dios te ha dado, que esta herradura me de suerte, salud y dinero.

Jesús, recordando estoy todas estas cosas y mas que todas ellas fueron santamente cumplidas. Este deseo que pienso en estos momentos: Que esta herradura de imán, muy poderosa tenga convertidas todas las virtudes y prodigios con la herradura pueda hacer cuanto yo quiera, me será fácil salir de cualquier parte sin que nadie lo sepa, o lo note siquiera, conseguir dinero y honores, lograr que me amen todas las personas que yo quiera, librarme de todo y ponerme a salvo de mis enemigos y todo acontecimiento fatal de la vida, todo esto lo creo como si lo estuviera viendo por tus incomparables virtudes, amen.




BannerFans.com

BannerFans.com
COMPARTE DONDE QUIERAS
BannerFans.com BannerFans.com
Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...
BannerFans.com
DÍAS DE VIDA


ARTÍCULOS


COMENTARIOS
BannerFans.com
BannerFans.com
BannerFans.com
BannerFans.com
BannerFans.comIMAGEN 215 X 220
BannerFans.com BannerFans.com
BannerFans.com
BannerFans.com
BannerFans.com
BannerFans.com
BannerFans.com BannerFans.com
BannerFans.com
BannerFans.comConócete mejor y visita tu Horoscopo, haz click en la imagen... BannerFans.com
BannerFans.com

BannerFans.com
BannerFans.com
BannerFans.com
BannerFans.com
BannerFans.com
BannerFans.com
BannerFans.com
BannerFans.com
BannerFans.com
BannerFans.com
BannerFans.com

BannerFans.com
BannerFans.com
BannerFans.com
BannerFans.com
BannerFans.com
BannerFans.com
BannerFans.com



            

Sígueme en facebook
Sígueme en Twitter
Sígueme en youtube
Sígueme en google+
Sígueme via RSS
Contacta
Únete a la página de tuenti
Añadir a favoritos
Te conjuro, espíritu del Mal, para que no te acerques a este blog, ni a su autor, ni a su familia; y que te alejes de esta medalla de San Benito bajo cuya protección y amparo ha sido colocada; en el nombre de Dios Padre Omnipotente, que hizo el cielo y la tierra, el mar y todo lo que en ellos se contiene. Asimismo, que desaparezcan y se alejen de esta medalla toda la fuerza del Adversario, todo el poder del Diablo, todos los ataques e ilusiones de Satanás, a fin de que todos los que la usaren gocen de la salud de alma y cuerpo. Amén. Así sea.